Se suele confundir la retribución variable con el destajo. La RAE lo define como: “modo de contratación laboral en el que se cobra en concepto del trabajo realizado y no del tiempo empleado”.
Es habitual pagar por pieza fabricada. Cuanto más fabriques, más cobras. Eso es el destajo. Hay quien paga por destajo y por horas extras. Al final el coste se puede disparar si no se hacen bien los cálculos. El destajo es cómodo porque no hay que hacer ningún cálculo y hace años, cuando no era fácil hacerlos, era la forma más cómoda de proceder.
Actualmente, con los sistemas informáticos y programas de producción es más fácil conocer la producción y aplicar un incentivo a partir de cierta producción.
Se define Producción Normal la que hace el operario en condiciones normales. Para conocerla es necesario realizar un estudio de tiempos y un análisis de producciones. Se define Producción Óptima la máxima que puede hacer el operario y que la OIT (Organización Internacional del Trabajo) establece en un 40% superior a la normal.
Por tanto, un sistema de retribución variable lo que hace es establecer una cantidad económica que se pagará en función del nivel de producción y cuyos márgenes quedan ya establecidos de antemano.
Por ejemplo, si la producción normal es de 10 piezas/hora, la óptima es de 14.Si el operario produce 10 unidades/hora, no cobrará incentivo. Si hace 14, cobrará el máximo, que habitualmente se establece en un 40% del sueldo base. Si su producción está entre 10 y 14, cobrará la parte correspondiente según las horas trabajadas.
Es posible que produzca menos de 10. En ese caso, si el sistema de tiempos está aprobado por la empresa y trabajadores, puede llegar a ser sancionable si ese resultado es reiterado.Si el operario produce más de 14 unidades reiteradamente, entonces se concluye que, o bien el sistema está obsoleto o han cambiado las condiciones de trabajo, en cuyo caso se deben establecer nuevos márgenes de producción.
Podemos ayudarte en el establecimiento de sistemas de retribución variable de la siguiente manera:
- Implantando sistemas estandarizados de tiempos, cronometrando las operaciones y analizando los métodos de trabajo para su optimización.
- Valorando económicamente el impacto de la implantación del sistema de retribución variable y planteando alternativas de flexibilidad de la plantilla.
- Asesorando sobre los aspectos legales y sindicales de la implantación.